Muchas empresas ya cuentan con plataformas Software as a Service (SAAS) como Monday o Trello, ERPs como SAP, CRMs (HubSpot, Zendesk Sell, etc.), entre otras. Pero es común encontrar retos de querer combinar los flujos de trabajo entre estas plataformas, como agregar un cliente en SAP al ser trasladado a dicha clasificación en HubSpot, o procesos más complejos.
Existen soluciones tales como Zapier o Integromat, que ya conectan muchas plataformas existentes entre si. Dichos servicios permite leer nuevos registros en un Google Sheet, notificar vía correo la actualización, mover algunas tarjetas dentro de Trello y mucho más. Son una solución muy sencilla que no requieren de un programador para poder realizar la integración y automatización entre plataformas. En el mejor de los casos esto bastará para poder llevar a cabo las conexiones que requieren las empresas.
Sin embargo, al entrar más en detalle en los triggers (disparadores) y acciones que se pueden combinar, se contemplan las acciones más comunes y no cuentan con tantas personalizaciones como uno puede llegar a necesitar. Existen acciones mucho más complejas que no pueden ser automatizadas por estos servicios, pero la gran mayoría de las plataformas SAAS brindan acceso a su API (Access protocol interface).
Una API es una interfaz de integración que permite a los desarrolladores realizar acciones de forma programática. En otras palabras, con código se pueden automatizar muchas de las acciones que la plataforma permite a los usuarios, pudiendo realizar cientos de tareas por segundo. Ello permite a los desarrolladores crear flujos e integraciones complejas entre múltiples plataformas, automatizando tareas repetitivas.
Las integraciones no terminan ahí, ya que en plataformas que no cuentan con API aún es posible conectarlas con otras plataformas mediante el uso de scripts que simulan las acciones del usuario (iniciar sesión, descargar reportes, etc.), con lo cual se puede obtener información que posteriormente sea inyectada a otras plataformas como un BI.
A manera de síntesis, sacar el provecho máximo de tus plataformas no significa limitarse a utilizarlas únicamente para lo que fueron diseñadas. Sino tener la posibilidad de combinar la información que podemos extraer de éstas para darle ún mejor uso de análisis, o automatizar otros flujos de trabajo dentro de otros sistemas.